Diplomacy

A comienzos del siglo XX, las siete grandes potencias europeas se disputan la supremacía continental. En un tablero donde las fronteras cambian, las alianzas se forjan y se rompen, deberás usar tu astucia y habilidad diplomática para dominar Europa. ¿Serás capaz de construir la estrategia definitiva y mantener la confianza de tus aliados… hasta que ya no te necesiten?

¿Por qué jugar Diplomacy?

Diplomacy es un clásico eterno de la estrategia y la negociación, donde la suerte no existe y todo depende de la interacción entre jugadores. Ideal para quienes disfrutan de juegos profundos de alianzas, engaños y tácticas políticas, con partidas llenas de tensión y diplomacia pura.

Ficha técnica

• Jugadores: 2 a 7

• Edad: A partir de 14 años

• Duración: Variable, dependiendo de la negociación y número de turnos

• Diseñador: Allan B. Calhamer

• Publicado originalmente: 1959

Cómo se juega

Cada jugador toma el control de una de las grandes potencias europeas de la época: Alemania, Austria-Hungría, el Imperio Otomano, Reino Unido, Francia, Italia o Rusia. La partida se desarrolla a lo largo de rondas que representan las estaciones de primavera y otoño, donde los jugadores:

• Dan órdenes simultáneas a sus unidades terrestres y navales.

• Mueven tropas para conquistar centros de suministro, esenciales para aumentar su ejército.

• Negocian con otros jugadores para formar alianzas temporales, pactos secretos y acuerdos tácticos.

La clave está en la negociación y la traición: el azar no interviene. El juego premia a quienes mejor manejan la diplomacia, el engaño y la estrategia para asegurar el control del continente.

Objetivo

Controlar 18 o más de los 34 centros de suministro al final de una ronda de otoño para lograr la victoria absoluta. Alternativamente, los jugadores pueden acordar terminar la partida en empate o tras cierto número de turnos.

¿Listo para dominar Europa con estrategia, diplomacia y un poco de traición? En Diplomacy, el poder se gana con palabra, no con dados.